Sistema de suspensión hidráulica del tractor: el conductor controla sin esfuerzo la elevación y descenso de los implementos (como arados y sembradoras) junto con la profundidad de arado a través de una válvula de distribución (un tipo de válvula de control direccional multidireccional) dentro de la cabina. Los tractores modernos están además equipados con válvulas proporcionales electrohidráulicas que se integran con GPS y sistemas de conducción autónoma. Esto permite una agricultura de precisión basada en mapas, controlando automáticamente la profundidad de arado para garantizar operaciones consistentes y rendimientos óptimos.
Cosechadora: desde el ajuste automático de la altura del cabezal y el control de la velocidad del sinfín de granos hasta la descarga automática de granos cuando el tanque de granos está lleno, cada acción automatizada depende de válvulas de control direccional de precisión y válvulas de control de presión que funcionan detrás de escena. Estos componentes aseguran una cosecha continua y eficiente, minimizando la pérdida de grano y la intervención manual.


